domingo, 7 de septiembre de 2014

Rincon Minero, un lugar mágico cerca del cielo.(Quinta parte)

Amigos mios, continuando con esta serie de relatos acerca de este maravilloso lugar llamado Rincón minero, hoy les traigo el siguiente video*.

Espero lo disfruten y que se den la oportunidad de visitar y conocer Santo Domingo y por supuesto El Rincón Minero, que es atendido por el buen amigo Rogelio Oaxaca.

En los próximos días les presentare una propuesta muy interesante para todos aquellos que deseen ir y hacer un recorrido por aquellos rumbos, esperen noticias amigos.

* Vídeo de edman10 



sábado, 6 de septiembre de 2014

Rincon Minero, un lugar mágico cerca del cielo.(Cuarta parte)

Veo con agrado  que a ustedes mis amigos les han gustado esta serie de relatos y esto me llena de ánimos y de alegría por ver que son bien recibidos y para seguir adelante con los mismos, solo quisiera pedirles que compartan esta pagina y sus
historias, para que más personas puedan conocer estos lugares mágicos y que están llenos de historia. 

Dicho esto comenzamos.


¿Ven la construcción ?
Así disfrutamos la tarde, pero la aventura y las maravillas aún no terminaban, pues.....

Luego de pasar momentos inolvidables y de disfrutar al máximo en La cabañita, Rogelio nos indica que es hora de continuar con nuestro recorrido, y saliendo nos encontramos con una casita de Santa Eulalia que sinceramente es una joya, pero de esta les hablare en otra ocasión, pues me parece lo más correcto platicar con sus propietarios primero y saber si no tienen inconveniente alguno en que publique acerca de su propiedad, así que en próximos días platicare con ellos.

Solo con potente zoom se ve bien
Luego de salir de la casa en cuestión Rogelio nos dice, prepárense para ir al cielo y disfrutar de una vista privilegiada y en verdad así fué, el camino es fantástico y que paisaje; si alguna vez he visto maravilla igual ha sido al viajar en avión, pero hoy no era por esa razón.  

Esta vez era a nivel del suelo, aunque ese suelo parecía fundirse con el cielo en un abrazo fuerte y candoroso, estrecha y perfecta  unión entre el creador y sus criaturas; muestra sublime e inequívoca de su poder y amor por nosotros. Pareciera que Dios tendía sus manos en pos de nosotros con el único afán de llevarnos a la gloria por un instante en este mundo.

La tarde lluviosa contribuía más a la sensación de apacibilidad y sosiego que el paisaje con su perfección nos brindaba, no nos quedaba duda de que, lo que plasmo Rubén Fuentes en su canción "Qué bonita es mi tierra", es más que cierto y que dice así:

¡Ay!, caray, caray, qué bonita es mi tierra qué bonita qué linda es.

Hizo Dios un sarape bordado con sol
y del cielo un sombrero de charro moldeó.
Luego formó las espuelas con lunas y estrellas
y así a mi tierra vistió.

¡Ay!, caray, caray, qué bonita es mi tierra qué bonita qué linda es.
No, no hay arco iris que pueda igualar
el color de mi tierra, su cielo y su mar
Dios te formó para ser el orgullo del mundo.
Te dio bendiciones sin par.

¡Ay!, caray, caray, qué bonita es mi tierra qué bonita qué linda es,
¡Qué linda es! **
Avanzamos por el estrecho y sinuoso camino de terracería y lentamente fuimos subiendo hacia la cima del cerro de las antenas, en el trayecto pudimos observar bellas, majestuosas e inigualables postales, mezcla increíble entre el desértico entorno  y la serranía que nuestro Chihuahua tiene para aquellos que buscan disfrutar de la naturaleza y de la belleza incomparable de nuestro terruño; atrévanse a conocerlo no se arrepentirán.

 
El paisaje maravilloso nos invita a descender del vehículo en el que viajamos para sentir la lluvia golpear nuestros rostros, deliciosa sensación nos produjo esta al tocar nuestra piel y a la vez nos provocó sentir un ligero escalofrío ante la frescura del clima otrora caliente; y a la vez hace que nuestra mirada se pierda en lontananza, una y otra vez recorremos con nuestra vista las escarpadas laderas y el terreno, por doquier que miramos todo es hermoso, la grandeza nos abruma y nos embelesa a la vez.
Y en verdad no puedes apartar tu mirada de paisajes tan llenos de encanto, de belleza, paisajes majestuosos que hacen descubrir al hombre lo diminuto que es ante la creación de Dios. 


A lo lejos se divisa Santa Eulalia pero más allá, nos dice Rogelio, se puede ver Chihuahua y el aeropuerto y que se puede observar el descenso y despegue de los aviones, es espectacular, pero lo más bello es ver como poco a poco se encienden las luces de la ciudad, de nuestra hermosa capital.





 
Las nubes se ven negras y empieza a caer la tarde, la luz va decayendo poco a poco, el espectáculo es impresionante y nos conmueve, al fin hemos llegado a nuestro destino, el cerro de las antenas.

Al llegar quedamos azorados ante lo que nuestros ojos veían, al fondo se aprecia Chihuahua y más hacia la derecha se ve el parpadear de la pista del aeropuerto internacional Roberto Fierro, nunca imaginamos encontrar un lugar así-en lo personal ni siquiera tenía idea de que existía-. La sensación que repentinamente nos invadió era cómo si estuviésemos volando, súbitamente me vino a mi mente el recuerdo de esos vídeos en que se pueden apreciar a las majestuosas águilas planear en las alturas, el verlas imponentes escudriñar todo el entorno y ascender y descender a placer, así podría decirse que me sentí; cual águila al ver todo desde las alturas.

Llegamos justo a tiempo para ver el espectáculo maravilloso de ver como las luces mercuriales iban encendiéndose poco a poco, unas por aquí, otras por allá, y otras más allá, ver a la ciudad cubierta por una ligera bruma-que en realidad era una cortina de agua que caía sobre la misma- he visto a mi querida tierra al ir llegando por la carretera que viene de Delicias y he podido apreciar su belleza, pero nunca como hasta ese día, el cual nunca podre olvidar pues fuimos a un "Lugar mágico cerca del Cielo".


 








* Imágenes cortesía de: José Márquez.
** Que bonita es mi tierra. Autor Rubén Fuentes.